En
nuestra sociedad se están dando cambios vinculados a una incipiente
convergencia tecnológica y cultural que se manifiesta a través de nuevos modos
de comunicarnos, en las relaciones sociales, en el ámbito laboral, en la
construcción de subjetividades y en el acceso a la información.
La
educación convencional cada día se ve inmersa en estos procesos de
transformación con la incorporación de las nuevas tecnologías en las aulas de
clases.
En
los actuales momentos, la educación virtual se ha convertido en el motor de
cambio e innovación en los campos no solamente sociales, científicos y
técnicos, sino también como práctica educativa que ofrece la oportunidad de
reflexionar y acceder a procesos de aprendizaje dinámicos, mediados por
planteamientos pedagógicos, metodológicos, científicos y técnicos, lo que
permitirá a las nuevas generaciones ser partícipes de la era del conocimiento.
La
virtualidad cada día nos ofrece la posibilidad de establecer y crear
entornos nuevos de relación, y las diferentes formas que pueden ser
usados nos brinda un máximo de posibilidades con su potencial.
Con
los crecientes avances en la educación virtual, han ido apareciendo nuevos
entornos y plataformas para el aprendizaje, como por ejemplo los MOOC (Massive
Open Online Course) en inglés, COMA (cursos online masivos abiertos) en
español, con el cual se ha masificado la enseñanza a nivel mundial acortando
los tiempo y el espacio. Pero para que este tipo de plataforma funcione de
manera adecuada para la enseñanza se hace necesario contar con un buen diseño y
planificación para la puesta en marcha de este tipo de cursos. Dentro de sus
bondades que presenta estos entornos de aprendizaje se encuentra que los
individuos y grupos de trabajo comparten documentos en línea, interactúan en
blogs o wikis aportando sus propias interpretaciones de los contenidos del
curso, al mismo tiempo pueden hacer comentarios al trabajo de los demás
compañeros para fortalecer su experiencia de aprendizaje con un sin número de
participantes y en la mayoría de las veces de forma gratuita.
Han
aparecido nuevos entornos virtuales que todavía están en etapa de exploración
con un potencial de usarlos al máximo de sus posibilidades en el ámbito del
proceso enseñanza aprendizaje, pero para ello se necesita de nuestra capacidad
de saber usarlos y adaptarlos a los procesos de enseñanza aprendizaje, como
referente mencionamos la realidad virtual.
En la actualidad este tipo de tecnología se está empleando en el campo
de la educación con dos tipos de contenidos, el primero de ellos es
tratar de imitar el mundo real, por ejemplo museos virtuales, recorrido por lo
interno del cuerpo humano, etc. El segundo tipo son contenidos que simulan
objetos en 3D realizados por computadoras.
La riqueza de todos estos nuevos entornos es enorme y su poder reside en nuestra capacidad de saber usarlos al máximo de sus posibilidades y ser incorporados en los nuevos espacios educativos tradicionales y estar a la vanguardia de los avances tecnológicos que son cambiantes cada día.
La educación virtual ha permitido que más personas tengan acceso a los procesos de enseñanza que, de otro modo serían difíciles o hasta imposibles. Sin embargo, es un campo amplio y complejo en el que debemos actualizar nuestros conocimientos cada día, pues avanza rápidamente.
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